Cambio social e inmigración

Resumen

La Comarca de La Segarra en Cataluña se ha caracterizado, como otras, por un rápido incremento de la inmigración en los últimos diez años. De hecho en una comarca con poco más de 23.000 habitantes la inmigración representa en este momento más del 20% de la población, llegando en algunas localidades al 40% (es el caso de Guissona). Preocupados por este hecho y por la difícil adaptación de los servicios sociales y educativos a las crecientes y diversas necesidades que se plantean nos plantearon realizar un estudio que se materializó pasando 1088 encuestas y con 9 grupos de de discusión (políticos, técnicos de los servicios sociales y educativos, entidades, ancianos, adultos, jóvenes, hombres y mujeres inmigrantes) y que ha permitido analizar cómo vive esta población esta nueva presencia. La comunicación se centrará en presentar los datos relativos a las actitudes mutuas entre autóctonos e inmigrantes, así como entre los inmigrantes, a la vez que lo relacionamos con el cambio social que ha vivido la comarca y que lo peor se relaciona siempre con la inmigración. Los diferentes discursos obtenidos nos presentan un abanico amplio de actitudes ante el cambio social, hasta de los mismos inmigrantes, además de constatar los desequilibrios existentes entre los servicios sociales y educativos que se pueden ofrecer y las necesidades reales. No hay que decir que esto comporta que se culpe a la inmigración de: acaparar las becas, las prestaciones sociales, el tiempo de los trabajadores sociales, etc. La Comarca de La Segarra en Cataluña se ha caracterizado, como otras, por un rápido incremento de la inmigración en los últimos diez años. De hecho en una comarca con poco más de 23.000 habitantes la inmigración representa en este momento más del 20% de la población, llegando en algunas localidades al 40% (es el caso de Guissona). Preocupados por este hecho y por la difícil adaptación de los servicios sociales y educativos a las crecientes y diversas necesidades que se plantean nos plantearon realizar un estudio que se materializó pasando 1088 encuestas y con 9 grupos de de discusión (políticos, técnicos de los servicios sociales y educativos, entidades, ancianos, adultos, jóvenes, hombres y mujeres inmigrantes) y que ha permitido analizar cómo vive esta población esta nueva presencia. La comunicación se centrará en presentar los datos relativos a las actitudes mutuas entre autóctonos e inmigrantes, así como entre los inmigrantes, a la vez que lo relacionamos con el cambio social que ha vivido la comarca y que lo peor se relaciona siempre con la inmigración. Los diferentes discursos obtenidos nos presentan un abanico amplio de actitudes ante el cambio social, hasta de los mismos inmigrantes, además de constatar los desequilibrios existentes entre los servicios sociales y educativos que se pueden ofrecer y las necesidades reales. No hay que decir que esto comporta que se culpe a la inmigración de: acaparar las becas, las prestaciones sociales, el tiempo de los trabajadores sociales, etc.