Consecuencias psicológicas y neurobiológicas del maltrato infantilAlteraciones neuroendocrinas en la regulación del estrés e implicaciones en la salud mental infantojuvenil

  1. Marques Feixa, Laia
Dirigida por:
  1. Lourdes Fañanás Saura Director/a
  2. Jorge Moya Higueras Codirector

Universidad de defensa: Universitat de Barcelona

Fecha de defensa: 03 de junio de 2022

Tribunal:
  1. Maria Luisa Lazaro Garcia Presidente/a
  2. Olga Puig Navarro Secretario/a
  3. Mar Álvarez Segura Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 773398 DIALNET lock_openTESEO editor

Resumen

El maltrato infantil es un fenómeno muy complejo que afecta de manera integral al individuo y se asocia con diferentes problemas de salud mental en la infancia, adolescencia y adultez. Aunque el estudio del trauma relacional y sus consecuencias sobre la salud mental es de máxima actualidad en la literatura científica, son todavía escasas las investigaciones en población infantojuvenil. Estudiar su impacto en etapas de maduración cerebral y psíquica tan sensibles sería de gran relevancia para comprender los mecanismos neurobiológicos de sensibilización temprana y su relación con la psicopatología infantil. En primer lugar, el metaanálisis realizado en el contexto de esta tesis doctoral, confirma la relación entre la agregación de estresores durante la adolescencia y la presencia de sintomatología clínica internalizante (ansiedad, depresión, somatización) y externalizante (impulsividad, trastornos de la conducta, agresividad, consumo de drogas), demostrando que la acumulación de acontecimientos estresantes puede ser tanto una causa como una consecuencia de sufrir psicopatología. Para poder minimizar los efectos dañinos de las adversidades tempranas es imprescindible el desarrollo de herramientas útiles que permitan identificarlas y medirlas adecuadamente en los niños/as y adolescentes, facilitando la detección e intervención precoz por parte de los profesionales. En la presente tesis se ha diseñado y validado un nuevo instrumento con el que valorar de forma completa los acontecimientos vitales estresantes vividos en el último año por los adolescentes, el Life Events Inventory for Adolescents (LEIA). Este trabajo demuestra la relevancia de explorar la naturaleza de los eventos sufridos (si dependen o no de uno mismo, que involucren directamente a otras personas o no, etc.), así como la afectación subjetiva para el sujeto, ya que estas variables van a tener un impacto diferencial en la sintomatología expresada por el adolescente. Por otro lado, el estudio llevado a cabo en una muestra de niños/as y adolescentes, con y sin diagnósticos psiquiátricos (proyecto Epi_young_stress), pone de manifiesto que los traumas relacionales afectan de manera compleja y sistémica a la salud de los menores. Nuestros hallazgos indican que las experiencias de maltrato infantil se relacionan con la presencia de rasgos de la personalidad disfuncionales, como la desregulación emocional, la irritabilidad y la impulsividad. Estos rasgos, y la historia de maltrato en sí misma, se asocian a una mayor exposición a situaciones de estrés, incrementando el riesgo de revictimización. Considerando este complejo entramado, nuestro estudio apoya que la exposición a acontecimientos estresantes recientes y la desregulación emocional serían los elementos finales clave para explicar los comportamientos suicidas observados en niños/as y adolescentes. El maltrato infantil es un factor de riesgo transdiagnóstico en enfermedad mental. El proyecto Epi_young_stress, demuestra que el trauma relacional aumenta el riesgo de presentar sintomatología internalizante, externalizante y también se relaciona con la alteración del pensamiento, problemas de atención y dificultades en las relaciones interpersonales. En este contexto, y considerando la gran dificultad de los profesionales para definir el cuadro clínico que presentan los menores que han sufrido maltrato, este trabajo respalda el nuevo diagnóstico psiquiátrico incluido en la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11): el Trastorno por Estrés Postraumático Complejo (TEPT-C). Esta entidad diagnóstica incluye los síntomas postraumáticos clásicos además de alteraciones en la auto-organización (desregulación emocional, autoconcepto negativo y dificultades interpersonales), aspectos clave que merecen priorizarse en el tratamiento clínico. También se profundiza en los diferentes tipos de maltrato y el periodo ontogénico de exposición como factores de vulnerabilidad para desarrollar esta sintomatología compleja. Por último, se investiga el impacto del maltrato infantil en dos sistemas neurobiológicos esenciales en la respuesta al estrés psicosocial: el eje Hipotalámico- Hipofisario-Adrenal (HHA) y el sistema inmune. La aplicación de un paradigma experimental que permite estudiar la respuesta al estrés psicosocial agudo, el Trier Social Stress Test (TSST), y la recogida de muestras salivares, han permitido explorar el funcionamiento de estos sistemas biológicos en la muestra del proyecto Epi_young_stress. Los niños/a y adolescentes con historia de maltrato muestran una desregulación del eje HHA caracterizada por una hiporeactividad frente estrés agudo, así como elevados niveles de cortisol en condiciones basales, especialmente por la noche. También se ha detectado una relación dosis-efecto entre la frecuencia o severidad del maltrato y la desregulación del eje HHA. Además, existe una disociación entre su percepción subjetiva de estrés (elevada) y su respuesta biológica (aplanada). Por otro lado, se ha explorado, por primera vez en población infantojuvenil, la relevancia del maltrato en la reactividad frente estrés de la inmunoglobulina A secretora (s-IgA), un biomarcador del sistema inmune. Los hallazgos apuntan a que el estrés psicosocial agudo estimula la secreción de s-IgA, pero solo después de la pubertad. Sin embargo, los niños/as con historia de maltrato muestran una respuesta similar a los adolescentes, sugiriendo que el trauma complejo podría adelantar la maduración del sistema inmune de estos niños/as. En definitiva, esta tesis doctoral demuestra la importancia de evaluar tempranamente e integralmente las experiencias de trauma relacional vividas por los niños/as o adolescentes, ya que la tipología del maltrato, la comorbilidad, la severidad, la duración, así como la ventana ontogénica en la que ocurren, tendrán un papel fundamental en las expresiones psicopatológicas asociadas y en la sensibilización de los sistemas neurobiológicos implicados en la respuesta al estrés.